La pretensión del Gobierno de equiparar la fiscalidad del diésel a la de la gasolina (encareciendo la primera) protagoniza el debate empresarial. La Federación Nacional de Asociaciones de Transportes de España (Fenadismer), que agrupa a 32.000 pymes de transporte por carretera, advirtió este viernes de que la subida del impuesto al diésel afectará a un tercio de los transportistas españoles.
Fenadismer advierte de que con la actual regulación sobre fiscalidad de los carburantes para los sectores profesionales, la exención planteada beneficiaría solo a los vehículos de transporte pesado de mayor tonelaje, pero no a los transportistas de vehículos de menos de 7,5 toneladas, los cuales soportarían íntegramente la subida del impuesto.
Por ello, Fenadismer planteará al Ministerio de Hacienda que, con ocasión de la tramitación de la Ley de Presupuestos Generales del Estado para 2019 se modifique la regulación del gasóleo profesional incluyendo como beneficiarios también a los vehículos de menor tonelaje, los cuales representan casi una tercera parte de la flota de transporte en España.
La patronal se pronunció así tras las últimas declaraciones de la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, de incluir en el proyecto de Presupuestos para 2019 una subida de 4 céntimos en el impuesto de hidrocarburos referido al diésel con el objetivo de ir equiparando la fiscalidad entre el gasóleo y gasolina, de la que quedaría exento el sector del transporte por carretera. Además, sostiene Fenadismer, dicho incremento de la fiscalidad sobre el gasóleo de automoción se sumaría a la subida ya aprobada en los Presupuestos para 2018, que prevé a partir de enero de 2019 una equiparación del tramo autonómico del impuesto sobre los carburantes tanto para la gasolinas como para el gasóleo.
En la práctica, añade la federación, esta medida supondrá una subida de hasta el 100% del impuesto en algunas regiones, en concreto en las comunidades de Castilla-León, Cantabria, País Vasco, La Rioja, Navarra, Madrid, Aragón y Extremadura, que verán incrementada la fiscalidad de los carburantes repostados en dichas regiones, en hasta 4,8 céntimos.
Impulso a la movilidad eléctrica
La Asociación Empresarial para el Desarrollo e Impulso del Vehículo Eléctrico (Aedive) y la Asociación de Empresas de Energía Eléctrica (Aeléc) han firmado un convenio para potenciar la movilidad eléctrica. Un grupo de trabajo desarrollará un argumentario para fomentar el conocimiento (por parte de la sociedad, las administraciones, la empresa y medios de comunicación) de la movilidad eléctrica.
Ambas asociaciones arrojarán luz sobre la eficiencia de los motores eléctricos, el consumo del vehículo eléctrico y los costes de mantenimiento y de utilización (euro por kilómetro) frente a los vehículos convencionales.
Por su parte, la Asociación de Transportes Públicos Urbanos y Metropolitanos se mostró a favor de que se destine al transporte público una parte de lo que se recaude por la equiparación de la fiscalidad del diésel y la gasolina.
Por otro lado, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) cree que el aumento del impuesto al diésel es injusto para los consumidores e ineficaz desde el punto de vista medioambiental, subrayando que la “persecución” no debe ir dirigida a los vehículos de gasóleo, sino a los más contaminantes, sean del combustible que sea. La OCU no se opone a que se igualen los impuestos entre la gasolina y el diésel, pero pide que la equiparación se aplique a la baja.
Fuente: Cinco Días