El grupo ACS ha rebajado su endeudamiento neto prácticamente a cero a la espera de contabilizar la carga financiera vinculada a la compra de Abertis. La compañía ha pasado de los 5.812 millones de deuda neta de junio de 2014 a una posición neta de caja de 136 millones, según ha revelado esta tarde con la presentación de sus resultados. Restados los 195 millones en créditos que respaldan proyectos en concesión, ACS cierra la primera mitad del año con una deuda de 58 millones de euros, un 96% menor a la de hace un año (1.654 millones).

A la espera de mayor detalle en la presentación a analistas fijada para mañana, en las cuentas entregadas a la CNMV se recuerda que la toma de Abertis se cerrará en los próximos meses, por lo que el crédito que cuelga de esta adquisición pactada con la italiana Atlantia no tiene aún reflejo en el balance. La concesionaria catalana, eso sí, ya suma millones al beneficio neto del grupo que preside Florentino Pérez: 26 millones (parte proporcional del resultado de Abertis menos la distribución del coste de adquisición, gastos financieros y de transacción, e impuestos) que integran los 17 millones que ACS recibe directamente y los 9 millones que se ha apuntado la filial alemana Hochtief.

Precisamente, esta tarde tiene lugar la junta extraordinaria de Abertis en que se somete a aprobación la exclusión bursátil de la compañía a través del mantenimiento de la oferta de 18,36 euros por título a los accionistas que no se habían sumado a la opa que materializó Hochtief, liquidada el pasado 15 de mayo. La mayor concesionaria española de autopistas también aprobará en la reunión de accionistas la amortización de su autocartera. A partir de este punto se creará una sociedad en la que Atlantia contará con el 50% del capital más una acción, ACS tendrá el 30% y su filial germana se quedará el restante 20% menos una acción.

Al cierre de junio, las tres compañías que pactaron la opa tienen el 95,33% de Abertis, lo que figura en el balance de ACS como 7.978 millones de inversión puesta en equivalencia en función del 47,67% que le corresponde (28,6% directo y 19,07% a través de Hochtief). La parte que irá a manos de Atlantia figura como activo mantenido para la venta por otros 7.978 millones de euros.

El grupo aprovecha su tirón en construcción

En una primera mitad de ejercicio en que el euro se ha apreciado respecto a las principales divisas en que factura ACS, el resultado neto mejora un 7,4%, hasta los 447 millones. Este beneficio habría mejorado un 13,3% en términos comparables respecto a los tipos de cambio. El mayor rendimiento en el área de construcción de la citada Hochtief explica parte del crecimiento.

ACS concluye junio con una facturación de 17.777 millones, un 2,2% más que en el primer semestre de 2017; el ebitda crece un 2%, hasta los 1.224 millones, lo que deja el margen bruto de explotación en el 7,2%, y el ebit pasa de 900 a 946 millones, lo que representa un alza del 5,1%.

Por áreas de negocio, Construcción roza un incremento del 2% en sus ventas (13.353 millones), que se recogen en un 96% del exterior (América del Norte y Australia son los dos grandes mercados), y gana un 17,7% más, hasta los 231 millones. La división de obras arroja un margen bruto de explotación del 6,4% y roza los 58.000 millones de cartera de contratos (un 95% internacional).

El beneficio de Servicios industriales, de 214 millones en el primer semestre, es un 2,5% superior al de hace un año. Y Servicios, donde ACS ya solo cuenta con la filial española Clece, pierde fuelle ante la ausencia de extraordinarios (en 2017 se apuntó la plusvalía por la venta de Sintax), bajando un 25,1% su aportación al beneficio neto del grupo, al que entrega 17 millones. Las ventas de Clece, por contra, han mejorado un 6,9% hasta los 754 millones, mientras el ebitda marca una mejora del 11,6% y se sitúa en 40 millones.

Fuente: Cinco Días