La Autoridad Bancaria Europea (EBA por sus siglas en inglés) dará a conocer hoy los resultados de las pruebas de esfuerzo a las que ha sometido a los principales bancos europeos en 2018 y que el consenso de analistas considera que las entidades han afrontado en mejores condiciones que hace dos años, a pesar de que el examen haya contemplado escenarios más duros que en los anteriores tests.

“Creemos que los bancos europeos en general deberían estar mejor preparados que en anteriores rondas porque cuentan con mayores colchones de capital y una base de activos de menos riesgo”, afirman desde la agencia S&P Global Ratings.

Las pruebas dirigidas por la EBA evalúan la resistencia y capacidad de recuperación de 48 bancos de la Unión Europea y Noruega con al menos 30.000 millones de euros en activos, cubriendo así alrededor del 70% de los activos totales del sector bancario de la eurozona e incluyendo cuatro bancos españoles: BBVA, Banco Santander, CaixaBank y Sabadell. Bankia ha quedado fuera tras solicitar su exclusión al haber estado sometida en 2017 a un proceso de fusión con BMN. El Banco Central Europeo (BCE), en su calidad de supervisor bancario, ha llevado a cabo unas pruebas similares a unas 60 entidades adicionales que están bajo su vigilancia directa.

En línea con el criterio que adoptó hace dos años, la EBA no calificará a los bancos con aprobados ni suspensos, sino que divulgará indicadores que permitan identificar problemas en sus balances y posibles necesidades de capital. A pesar de que no habrá un umbral de referencia oficial que los bancos deben superar, los mercados suelen considerar que las entidades con un porcentaje de capital de máxima calidad CET1 por debajo de 5,5% en un escenario adverso pueden necesitar ampliar sus recursos o deshacerse de activos de riesgo.

Alemania, con ocho bancos, es el país más representado en la lista de entidades a prueba, que no incluye bancos de Portugal ni de Grecia. “En nuestra opinión, los bancos europeos afrontan en general los test de estrés con niveles más sólidos de capital, una base de activos de menor riesgo y algunos menos problemas judiciales pendientes que hace dos años”, señala la agencia S&P Global Ratings, añadiendo que el escenario macrofinanciero más adverso en los test de estrés de 2018 “es algo más negativo que hace dos años”.

El peor escenario macroeconómico contemplado en las pruebas implica una contracción del PIB de la UE del 1,2% en 2018 y del 2,2% en 2019, antes de alcanzar un crecimiento del 0,7% en 2020, lo que representa de forma acumulada una desviación del 8,3% respecto del escenario base de las pruebas, que contempla un crecimiento del 2,2% este año, del 1,9% en 2019 y del 1,8% en 2020, cuando en los exámenes de 2016 esta desviación era del 7,1%.

S&P Global considera que, a pesar de la mayor severidad del escenario más adverso, las asunciones manejadas no son tan duras como las más conservadoras aplicadas por la Reserva Federal en su último examen a o las de las pruebas de estrés del Banco de Inglaterra.

Banca española

Opinión de Santander. El consejero delegado del Grupo Santander, José Antonio Alvarez, se mostró el miércoles convencido de que la banca española, y en concreto su entidad, superará sin excesivas dificultades los test de estrés de la EBA.

Declaraciones de AEB. El presidente de la AEB, José María Roldán, confía en que los bancos españoles quedarán “razonablemente bien” en los test de estrés. “No parece que los test de estrés nos vayan a dar mucho susto”, subraya Roldán.

Sabadell. Varios analistas coinciden en señalar que los cuatro bancos españoles que se examinan sobrepasarán el 5,5% de capital en el escenario adverso. Sabadell parece, según estas fuentes, el que tendrá unos ratios más bajos que el resto.

Fuente: Cinco Días