Ryanair ha elevado a 75.000 el número de pasajeros afectados por la cancelación de hasta 400 vuelos que tenían previsto viajar desde o hacia España los días 25 y 26 de julio ante la huelga anunciada de los tripulantes de cabina. La aerolínea comunicó ayer que las cancelaciones afectaban al menos a 50.000 pasajeros en España, del total de 100.000 en toda Europa.
La compañía de bajo coste aseguró hoy que ya ha reubicado al 75% de los clientes afectados en días anteriores y posteriores a los paros y espera ampliar este porcentaje mañana, viernes, con nuevas reubicaciones para minimizar el impacto de las cancelaciones.
El Ministerio de Fomento fijará mañana los servicios mínimos para los días de huelga, aunque sigue sin resolverse si los 1.800 tripulantes llamados a la huelga están obligados al cumplirlos, al tener contratos laborales irlandeses. Los sindicatos convocantes de la huelga USO y Sitcpla han pedido al Ministerio que les aclare este punto, y la Asociación Española de Usuarios, Empresarios y Profesionales del Transporte Aéreo (Asetra) ha pedido al Ministerio de Trabajo que investigue si Ryanair está cometiendo algún fraude con el modelo de contratación de tripulantes que utiliza en España.
Fomento admite que la cancelación de vuelos por parte de Ryanair es legal, aunque va a solicitar a la aerolínea irlandesa información detallada sobre sus planes en la programación de vuelos con origen o destino España para que los usuarios sepan a qué atenerse cuanto antes y puedan reclamar compensaciones o reprogramaciones.
Por su parte, la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA), dependiente de Fomento, aseguró ayer que dispondrá inspectores en los principales aeropuertos para comprobar que Ryanair cumple los derechos de los pasajeros durante las jornadas de huelga
Tensas relaciones
Las relaciones entre la dirección y los sindicatos no hacen augurar que vaya a ver una solución negociada. Ryanair tachó ayer de «noticia falsa» su supuesta amenaza de abandonar España, saliendo al paso de las declaraciones realizadas ayer por los sindicatos, a los que acusó de difundir “basura” contra la primera aerolínea que opera en el país.
Pese a dos jornadas de huelga, la aerolínea mantiene sus previsiones de crecimiento en España para este año, que prevé cerrar con 41 millones de pasajeros transportados, un 7% más que en el ejercicio anterior, y señala que el impacto económico será mínimo, según el director general de márketing de Ryanair, Kenny Jacobs.
El directivo cree que no se desconvocará el paro, aunque se mostró convencido de que es sólo una cuestión de tiempo llegar a un acuerdo, teniendo en cuenta que ya ha reconocido a las organizaciones sindicales de pilotos y TCP en otros países como el Reino Unido, Italia y Alemania, en este último con el acuerdo al que ha llegado hoy mismo con el sindicato de tripulantes Ver.di.
Fuente: El País