La ministra de Defensa, Margarita Robles, ha afirmado este lunes que la venta de 400 bombas de precisión láser a Arabia Saudí está «en fase de estudio». Robles, sin embargo, también ha añadido que «todos los programas, contratos y proyectos que están en marcha [en el Ministerio] son objeto de análisis y estudio». «Se puede llamar como quieran: paralizados, en estudio. Sean satélites o venta de bombas a otros países», ha dicho la ministra.
El pasado lunes la Cadena SER afirmó que el Ministerio de Defensa había decidido paralizar la venta de bombas al país árabe frente a la posibilidad de que fueran utilizadas para bombardear Yemen. Pero esta decisión, debido a la queja de Arabia Saudí, puso en peligro el acuerdo para que el astillero público Navantia, ubicado en Cádiz, construya cinco corbetas por un valor de 1.800 millones de euros, el mayor contrato internacional en la historia de los astilleros públicos de Navantia.
La paralización de la venta de bombas también generó incertidumbre la pasada semana por las supuestas represalias que Arabia Saudí pueda tomar, ya sea con la renegociación de contratos de empresas españolas que invierten en el país árabe o con la pérdida de confianza de la monarquía saudí.
Hace pocos años dos compañías españolas lograron importantes contratos en la construcción del AVE entre La Meca y Medina y del metro de Riad (capital de Arabia Saudí) -el primero, por un valor de 6.736 millones de euros y el segundo, por 6.500 millones de euros-.
El macroproproyecto del AVE a Riad está formado por las empresas públicas Ineco, Renfe y Adif, y las compañías privadas Indra, OHL, Copasa, Dimetronic, Talgo, entre otras. Mientras que la empresa Fomento de Construcciones y Contratas (FCC) se encarga del metro de la capital saudí.
Fuente: Cinco Días