La cotización de Mediaset en la Bolsa española se ha calentado en la mañana de este lunes por los rumores de compra, pero el desmentido por parte del supuesto comprador (la matriz italiana del grupo) ha llevado un poco de calma de nuevo a los títulos. Aún así, la empresa termina el día con una subida del 9,78%.

En concreto, las acciones del grupo propietario de cadenas de televisión como Telecinco o Cuatro han marcado toda la mañana una subida de cerca del 15%, hasta los 6,97 euros, con repuntes incluso del 20%. El impulso repentino de los títulos llegaba después de que Bloomberg publicara que la matriz italiana del grupo, que tiene el 52% de las acciones y está controlada por la familia Berlusconi, podría estar preparando una oferta para hacerse con toda la propiedad de la firma española. Las mismas fuentes citadas por Bloomberg aseguraban, eso sí, que eran solo unos planes muy preliminares y que no estaba decidida la operación.

El desmentidos sobre dicha compra ha llegado cerca de las dos de la tarde, con lo que la subida ha comenzado a desinflarse. Tres horas antes del cierre los títulos avanzan el 5%. Pero al final ha vuelto el oxígeno y al cierre ha logrado una subida del 9,78%. Ha sido en Roma donde un portavoz de Mediaset Italia ha asegurado a Il Sole 24 Ore que no tienen «ningún plan relativo a la compra del 48% de las acciones de Mediaset España». La empresa en España no ha hecho comunicación alguna al regulador bursátil.

La subida este lunes de las acciones contrasta con la marcha que lleva la compañía este año. Hasta el viernes sus acciones se dejaban en el año cerca del 35%. No era la única: su principal rival en el parqué y en la televisión, el grupo Atresmedia, también se dejaba el 33% en el año. Las nuevas plataformas de contenido online y el mercado de publicidad algo débil les estaba pasando factura. Sin embargo, Mediaset hoy despegaba: la subida del 15% de este viernes amortiguaba su batacazo anual al 25% este lunes. El rally ha quedado algo aplacado, pero incluso así, las pérdidas del año han quedado algo más reducida, al 28%.

Fuente: El País