Ya conocemos los nuevos móviles de Apple: más potencia, más autonomía, nuevas prestaciones… y más precio. El móvil se ha convertido en algo codiciado en nuestras vidas, tanto para aquellos que están dispuestos a gastarse el dinero en ellos como para aquellos que están dispuestos a quedarse con tu móvil. Aquí van unos consejos por si el destino guarda para nosotros el mal trago de un hurto. Nos ayudan la revista Wired, Cinco Días y la OCU.

Ten cuidado. Vigila tu móvil, por lo que más quieras. 

Seguimiento. Para empezar, enciende la opción de seguimiento de tu móvil (puede llamarse encontrar mi dispositivo o buscar mi Iphone, según el terminal que tengas). En los dispositivos Android está en Configuración – Seguridad y ubicación; en los iOs, está en Ajustes – [tu nombre] – iCloud. Así, si has perdido tu móvil, sabrás exactamente dónde está (aunque no deberías ir a buscar al ladrón tú mism@).

Bloqueo. Guardamos en nuestro móvil una cantidad absurda de datos personales y acceso a nuestras cuentas de Facebook, Instagram, correo, Whatsapp… el único obstáculo entre estos datos y el mundo exterior es una contraseña, un patrón de puntos, una huella dactilar o una cara. En los dispositivos Android está en Configuración – Seguridad y ubicación; en los iOs, en Ajustes – Touch ID y código o Face ID y código.

Haz una copia. Pese a todo, es posible que no vuelvas a ver tu móvil, así que tener una copia en la nube de todo siempre resulta una buena idea (aunque nunca usemos la copia). Por lo general, las apps guardan todos tus datos por ti. Pero hay otros, como la configuración o las fotos, que requieren un paso extra. En Android es tan sencillo como ir a Sistema – Copia de seguridad (esto puede variar en algunos dispositivos). En iOs, vuelve a ir a Ajustes, luego pulsa sobre tu nombre, luego sobre el icono de tu dispositivo y, por último, en Copia en iCloud. También existen soluciones como Dropbox que pueden ayudarte en lo de guardar fotos.

Bola extra. Recuerda que siempre puedes contratar seguros (no, no son precisamente baratos), puedes poner una imagen con algún dato de contacto tuyo (un email, quizás) en vez de esa foto de tus hijos en la playa. Android te da la opción en el menú Seguridad y ubicación. En los iPhone lo puedes hacer en la app Salud.

  •  DESPUÉS

 Asegúrate. Vale, ha sucedido lo peor y tu terminal no está donde tiene que estar. Lo primero de todo es asegurarnos de que nos lo han robado. Antes te contamos que podías activar la función Encontrar mi dispositivo o Buscar mi Iphone. Cuando la usamos desde otro dispositivo no solo nos indica su localización, sino que, además, nos permite reproducir un sonido para poder encontrarlo o mostrar un mensaje en pantalla si alguien lo encuentra. Existe una tercera opción, que es el borrado del teléfono, pero solo lo debemos usar si lo damos por perdido, porque no solo lo dejará vacío (lo cual es apropiado si queremos salvar nuestros datos) sino que también dejará de estar localizable. Sigue leyendo antes de llegar a este punto.

Llama a la operadora (y a la poli). Pide un teléfono: una llamada a tu operadora te permitirá asegurarte de que el teléfono no incurra en gastos o, lo que es peor, hacerse pasar por ti. Es buena idea denunciarlo, aunque las posibilidades de encontrarlo sean pocas. Es como perder el DNI, es mejor que la policía sepa que tu móvil ya no es tuyo antes de que otros lo usen. Este paso será igualmente necesario si tienes contratado algún tipo de seguro (ver bola extra) y para que tu operador lo inhabilite con el código IMEI.

Cambia contraseñas. Facebook, Instagram, Twitter, Tinder… Incluso si estás bien protegido, más vale cambiar contraseñas para asegurarnos que nadie accede a nuestra vida privada. Por lo general, apps como Facebook, Twitter o las de Google suelen mostrarte los inicios de sesión, y te dan la posibilidad de cerrar todas las sesiones de una vez. Haz lo mismo con los correos. Y, si lo prefieres, borra todo tu teléfono con un solo clic (mirar punto Asegúrate). 

Fuente: El País