La ralentización de la economía española ya está trasladándose de los grandes indicadores macroeconómicos a las cuentas de resultados de las empresas. Esa es la principal conclusión de la encuesta realizada el pasado mes de diciembre por el Instituto de Censores Jurados de Cuentas de España (ICJCE) a 34 auditores que analizan las cuentas de medianas y grandes empresas. “Las respuestas obtenidas demuestran que se ha revertido el optimismo de períodos anteriores”, remarca el informe, que destaca como el endeudamiento privado ha dejado de caer a los ritmos de ejercicios anteriores, los beneficios ya no crecen a la velocidad del pasado y cómo el reparto de los mismos a los accionistas se ha ralentizado.

En cualquiera de los tres campos, los resultados muestran un deterioro significativo de los resultados empresariales en doce meses. Si hace un año, el 56% de los auditores consultados confirmaba que las empresas estaban desapalancándose y solo el 11% afirmaba que estaba aumentando su endeudamiento, en la actualidad esos porcentajes se han dado la vuelta, ya que solo el 20% confirma que haya reducciones de pasivo y un 25% constata que se están incrementando la deuda. También los beneficios y el reparto de dividendos se han visto afectados por la ralentización económica. El 87% de los auditores encuestados en diciembre de 2017 constataba que veía aumentos de resultados respecto al ejercicio anterior, un porcentaje que se estrecha al 25% en la edición de este año. De la misma manera, dos tercios de los auditores auguraban un incremento en el reparto de dividendos y en la encuesta de diciembre de 2018 esa cifra solo llega al 30%.

Otro dato que, según la encuesta del ICJCE, confirma el cambio de ciclo es la reticencia de los accionistas a realizar nuevas aportaciones al capital de las empresas. Si hace un año, el 78% se mostraba dispuesto a nuevos desembolsos, ese porcentaje cae hasta el 40% este año. Los auditores también detectan un fuerte ajuste de la liquidez, “un signo clarísimo de que las empresas españolas se estarían preparando para momentos más duros que los actuales”.

Fuente: Cinco Días