La compañía estadounidense Apple ha anunciado este martes que ha llegado a un acuerdo con la administración fical francesa para pagar 10 años de impuestos atrasados por un valor estimado de 500 millones de euros. «La administración fiscal francesa cerró recientemente una auditoría plurianual sobre las cuentas francesas de la compañía y el ajuste será comunicado en nuestras cuentas públicas», ha explicado Apple a la agencia de noticias AFP, confirmando una información adelantada por el semanario francés L’Express. Oficialmente, la autoridades francesas se ha negado a dar detalles amparándose en la confidencialidad
Según la web de la publicación, la multinacional pagó unos 500 millones de euros en el marco del acuerdo confidencial alcanzado en diciembre con el fisco francés. Esta cantidad fue confirmada a AFP por una fuente cercana al caso. Un trato similar al que se le dio Amazon el año pasado. «Conocemos el importante papel que tienen los impuestos en la sociedad y pagamos nuestros impuestos en todos los países donde operamos, en total conformidad con las leyes y prácticas en vigor a nivel local», ha dicho Apple en declaraciones a la agencia de prensa, sin precisar el monto del acuerdo.
La facturación de Apple pasó de 6.600 millones de euros en 2008 a 47.700 millones de euros en 2017, según L’Express, que indica que esta cifra fue en gran parte ingresada en Irlanda, un país donde el impuesto de sociedades es más bajo, supone un 12,5% frente al 33% que se paga en Francia. En su estructura francesa, según del semanario, declaró ingresos de 89,3 millones en 2017 y pagó 14,4 millones de impuestos. Las negociaciones con el fisco francés se referían al impuesto de sociedades que pagó Apple en Francia en los últimos 10 años, considerado demasiado bajo por el Ministerio de Economía en relación a su facturación, en particular gracias a las ventas de teléfonos iPhone.
El fisco francés renuncia así a iniciar un proceso sancionador contra Apple que potencialmente podía haberle reportado el doble de recaudación, pero que hubiera supuesto un contencioso judicial largo y costoso. La adopción de una ley en Francia que permite abrir un procedimiento penal por fraude fiscal, ha favorecido las negociaciones entre las grandes empresas digitales y el fisco francés.
«Estamos orgullosos de la contribución de Apple a la economía francesa», ha añadido el grupo, que asegura haber invertido el año pasado 800 millones de euros en subcontratas en el país y de apoyar cerca de 240.000 empleos en Francia.
Fuente: El País