El Ministerio de Administraciones Públicas y los sindicatos de la función pública han llegado este lunes a un acuerdo sobre la oferta de empleo público para este año. Por primera vez desde 2010, año en que comenzaron los recortes se creará empleo neto. La oferta superará las 17.500 plazas, aunque oficialmente llegará a casi 20.000, ya que esta oferta incluirá puestos de trabajo que se ofertaron el año pasado a cuenta de la convocatoria de este año.

Del total de empleos de la oferta pública, que el Consejo de Ministros aprobará el próximo viernes, más de la mitad corresponden a lo que se llama el turno libre: algo más de 10.000. En este capítulo se incluyen las plazas que se crean para cubrir las bajas (sobre todo, por jubilaciones) que serían el grueso de esa cantidad.

A ellas habría que añadir 485 que corresponderían al aumento de plantilla neto, según expone CC OO. Estas plazas estarían destinadas a aumentar la lucha contra el fraude fiscal y laboral y a la Seguridad Social, una administración cuya plantilla está notablemente envejecida.

El sindicato de funcionarios CSI-F reduce las plazas del turno libre hasta los 8.371  porque, cifran en unas 1.800 las plazas que ya se ofertaron el año pasado a cuenta de la oferta pública de este año.

A la oferta del turno libre hay que sumar la destinada a promoción interna, que asciende a 5.977 plazas. En este caso no hay discrepancia entre unas cifras y otras.

Las cifras del acuerdo se completan con unos 2.900 puestos de trabajo creados para consolidar plazas ocupadas por interinos. Estos empleos corresponden fundamentalemente a la Agencia Tributaria, el Servicio Público de Empleo Estatal y el Imserso.

Por último hay que añadir una oferta extraordinaria de 323 empleos hecha para reforzar los centros de estancia de inmigrantes y los centros de acogida.

Los sindicatos de la función pública, CC OO, CSI-F y UGT, llevaban días negociando. El pasado 16 de julio la ministra Batet se vio por primera vez con las centrales de funcionarios. Desde entonces se han intensificado las reuniones hasta llegar al acuerdo de este lunes que, además de contener la oferta de empleo público en la Administración central para este año, también elimina los descuentos en los sueldos por baja médica.

En los recortes de 2012, se eliminó el acuerdo por el cuando un funcionario caía de baja cobraba el 100% del salario y quedaba en el suelo mínimo del 50% durante los tres primeros días y el 75% entre el cuarto y el vigésimo. En bastantes administraciones autonómicas ya se ha restituido ese recorte salarial y ahora se recuperaría para los trabajadores de la administración central.

Fuente: El País