El término herencia recibida lo institucionalizó José María Aznar, padrino político de Pablo Casado, en 1996. Un año antes, el PIB creció un 4%, las exportaciones un 10% y la deuda pública estaba próxima al 60% del PIB, y Aznar afirmó que España estaba en crisis y quebrada.

En 2018, cuando el Partido Popular abandonó el Gobierno, el PIB crecía un 2,5%, las exportaciones estaban estancadas, la deuda pública próxima al 100% del PIB. Y Pablo Casado habla de que fue un milagro económico, y advierte del apocalipsis que llega, aunque el PIB creció en el tercer trimestre lo mismo que antes de la moción de censura.

La Seguridad Social refleja la herencia de la gestión del PP. En 2011, antes de que Rajoy llegara a la Moncloa, el déficit era del 0,1% del PIB y había 67.000 millones en la hucha. Seis años después el sistema público de pensiones tiene un agujero de 18.000 millones y han dejado vacía la hucha. Siendo el único Gobierno de la democracia con el que los pensionistas han perdido poder adquisitivo, especialmente los tres millones de españoles que tienen una pensión inferior a 650 euros al mes.

En 1995 el precio medio de una vivienda en España era tres veces el salario medio anual. En 2004, el precio de una casa era siete veces el salario medio. Con un Gobierno del PP se había formado en España la mayor burbuja inmobiliaria desde Isabel la Católica; y Aznar, Rodrigo Rato, Mariano Rajoy y Pablo Casado en Nuevas Generaciones hablaban de milagro económico. José Luis Rodríguez Zapatero cambió la ley del suelo para prohibir la especulación en las tasaciones inmobiliarias, tuvo el primer superávit fiscal de la democracia que en 2007 llegó al 2% del PIB, ahorró casi 50.000 millones para la hucha de las pensiones que han protegido a los siete millones de pensionistas de los recortes y bajó la deuda pública neta al 23% del PIB. Y el PP tuvo el cinismo de culparle de la burbuja y de la crisis.

A todos los responsables del PP les instalan un botón en Génova para resetearse. El PP ha gobernado España 15 de los últimos 22 años, y ocho de ellos con mayoría absoluta. Pero en cuanto salen del Gobierno culpan a los socialistas de todos sus propios errores de gestión. Casado ha nombrado responsable de economía a Alberto Nadal. Este era hasta mayo el secretario de Estado de Presupuestos responsable de inflar los ingresos y a quien se le olvidó meter en lo que envió a Bruselas la subida de pensiones de 3.000 millones. Y tiene la cara dura de culpar al nuevo Gobierno, que aún no ha aprobado ninguna medida que afecte al déficit.

Nadal fue antes secretario de Estado de Energía, y aprobó la fórmula actual que fija los precios de la electricidad. Fue quien demonizó las renovables y puso el impuesto al sol para penalizar el autoconsumo fotovoltaico. Y hoy Casado y el PP culpan al Gobierno de Sánchez por el cierre de la fábrica de Alcoa, ya que la empresa ha dicho que se va por el elevado coste de la energía. Donald Trump sería becario en el PP.

Fuente: El País