Queserías Entrepinares se ha convertido con el paso de los años en una de las principales empresas de su sector. El motivo no ha sido otro que el de ser, desde 1999, el principal interproveedor de este tipo de productos de Mercadona, lo que le ha llevado en ese periodo a manejar cifras de ventas de cientos de millones con crecimientos habituales a doble dígito. Aunque eso sí, casi todas ellas con destino a un único cliente.

Un riesgo asumido y que a la larga no ha mermado su negocio. Tampoco en 2018. El ejercicio pasado fue otro año de récord para Entrepinares, con unos ingresos que, por primera vez, superaron los 300 millones.

En concreto, la cifra de negocios alcanzó los 305,6 millones de euros, un crecimiento del 6% respecto al anterior ejercicio. En 2017, la compañía radicada en Valladolid experimentó un repunte del 11% en sus ingresos después de un 2016 que arrojó su crecimiento más bajo en al menos diez años.

Una de las particularidades de las cifras de Entrepinares en el ejercicio pasado está en su tasa de dependencia de su único cliente, Mercadona. Como indica el informe de gestión, las ventas al grupo de supermercados propiedad de Juan Roig representaro el 94,18% de la facturación total.
Esto supone una reducción en 1,2 puntos porcentuales respecto a la dependencia que reflejaba en 2017, y representa el porcentaje más bajo desde 2010, cuando fue del 92%. Un dato que coincide con el cambio que Mercadona implantó en la relación con sus proveedores, reduciendo el grado de exclusividad con los mismos. El grado de dependencia se mantuvo estable en el entorno del 95% desde 2011 hasta 2017, cuando alcanzó su máximo en ese periodo, el 95,35%, tal y como consta en las cuentas de la compañía consultadas a través de la herramienta Insight View. En 2008, por ejemplo, la tasa estaba por debajo del 90%.

Como es habitual, Entrepinares incluye los datos de su relación con Mercadona en el apartado de estimación de incertidumbres. “Esta situación de dependencia (…) no supone una amenaza a la continuidad de las operaciones porque Queserías Entrepinares tiene la consideración de interproveedor de Mercadona, lo que significa una relación estable en el tiempo, basada en la confianza mutua y con voluntad de permanencia”, explica el informe financiero. La quesera cerró 2018 con un beneficio neto de 12,4 millones, un 2,3% menos.

El triple de trabajadores que hace 10 años

Además del continuo incremento de las ventas, otro dato que constata la evolución de Entrepinares con el paso de los años está en su plantilla. A cierre de 2018 estaba compuesta por 726 empleados, un 7,5% más que en 2017. Además, es el triple respecto al número de trabajadores que componían su equipo en 2008.

Fuente: El País