El Gobierno ha decidido indultar a las cabinas telefónicas, que estaba previsto que desaparecieran a partir del próximo 1 de enero al dejar de formar parte de las prestaciones incluidas dentro del servicio universal de telecomunicaciones. Finalmente, el Consejo de Ministros aprobará mañana un real decreto que elimina la obligatoriedad tanto de las guías telefónicas como del servicio de consulta telefónica sobre números de abonado, pero mantiene la exigencia de que exista un determinado número de teléfonos públicos según la población de cada localidad.

El anterior Ejecutivo del PP les concedió una prórroga de un año hasta 2019 a la espera de modificar la ley que regula el servicio universal de telecomunicaciones que obliga al Estado a mantener ambas prestaciones en todo el territorio nacional. Pero el Gobierno socialista se ha apiadado de ellas y ha decidido mantenerlas hasta la próxima trasposición a España del Código Europeo de las Comunicaciones Electrónicas (para lo que hay un plazo de dos años) «para hacer un análisis más completo y exhaustivo sobre el modo en que ir retirando prestaciones del servicio universal de telefonía», según informa Efe citando fuentes del sector.

La decisión ha causado sorpresa a los operadores puesto que tanto la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) como el borrador del proyecto de real decreto del Ministerio de Energía, Turismo y Agenda Digital eliminaba la consideración de las cabinas telefónica del servicio universal de telecomunicaciones, informaron a este diario en fuentes de las compañías.

Competencia considera que cabinas y guías han caído en «desuso» y «no existen razones de mercado actualmente para seguir garantizando su prestación como parte del servicio universal». Según sus datos, el 88% de los españoles jamás ha utilizado una cabina telefónica y, además, el coste de mantenerlas ha ido aumentando en los últimos años hasta situarse en 2,07 millones de euros en 2015.

Adjudicado a Telefónica

En la actualidad, al no quererse hacer cargo ningún operador de este servicio, el Gobierno obliga a Telefónica a prestar los servicios de guías y cabinas, hasta el 31 de diciembre de 2018. En el caso del servicio de información de números, Telefónica tenía adjudicado este servicio por un período de tres años -desde el 1 de enero de 2009 hasta el 31 de diciembre de 2011-. Con posterioridad a esa fecha no se ha convocado concurso alguno para designar al prestador de este servicio, por considerarse que el mismo ya está siendo garantizado por el mercado.

Se estima que Telefónica pierde unos cinco millones de euros anuales por mantener en servicio las cabinas que aún quedan en funcionamiento, con lo que no compensa por lo que recibe del servicio universal costeado entre todos los operadores. En lo que se refiere a las guías, a Telefónica solo le pidieron en 2017 304 ejemplares de la guía impresa.

Fuente: El País