Andrea Enria, presidente de la Autoridad Bancaria Europea (EBA, por sus siglas en inglés), está a un paso de tomar las riendas del Consejo de Supervisión del Banco Central Europeo. Su nominación se ha decidido este miércoles en una votación secreta en la que se ha impuesto a Sharon Donnery, gobernadora adjunta del Banco Central de Irlanda y a Robert Ophele, presidente del regulador financiero francés. El nombramiento de Enria, que relevará a Danièle Nouy, debe ser refrendado por el Parlamento Europeo.

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Enria, italiano de 57 años, lleva desde marzo de 2011 al frente de la EBA. A partir de ahora, pasará a hacerse cargo del Mecanismo Único de Supervisión (MUS), uno de los pilares fundamentales de la Unión Bancaria y cuyo cometido es la supervisión prudencial de las entidades financieras de la zona euro y de los países adheridos a este instrumento en la que se integran el BCE y los supervisores nacionales.

El pasado 23 de octubre los tres candidatos ya fueron escuchados por la Comisión de Asuntos Económicos y Monetarios del Parlamento Europeo, a cuyo presidente, Roberto Gualtieri, el BCE ha trasladado este miércoles su decisión. Según el BCE, también ha sido informado de esta candidatura el presidente del Consejo de Asuntos Económicos y Financieros, el ministro austriaco Hartwig Löger.

Según fuentes comunitarias, su nombramiento podría materializarse este mismo mes si pasa las tres citas en la Eurocámara. La primera está prevista para la semana que viene, cuando comparecerá a una audiencia pública ante el Comité de Asuntos Económicos y Monetarios. Este lo votará la semana siguiente, mientras que a finales de este mes se llevará su nombre al pleno del Parlamento. En caso de que dé luz verde, el próximo 1 de enero relevará a Nouy por un periodo no renovable de cinco años.

Enria empezó su carrera como economista en el Banco de Italia y asesor del exprimer ministro Lamberto Dini. Hasta 2004, ocupó varios cargos en el Banco Central Europeo como expero en análisis macroprudencial, secretario del Consejo de Supervisión y jefe de la división financiera. Posteriormente, fue nombrado secretario general del Comité de Supervisores Bancarios Europeos y jefe de Supervisión del Banco de Italia. En 2011 accedió a la presidencia de la EBA y fue reelegido para ese mismo cargo en 2016.

Fuente: El País