El grupo BBVA obtuvo un beneficio neto de 3.667 millones de euros entre enero y septiembre, el 15,2% menos que un año antes, debido, en parte, a la falta de ingresos extraordinarios. Hace un año obtuvo 633 millones de plusvalías por la venta de BBVA Chile.
Durante la presentación de resultados ante los medios, vía telefónica, el consejero delegado Onur Genç, abordó el tema del cobro por los depósitos una vez que los tipos negativos parecen haberse instalado por bastante tiempo. «En algunos países ya se están cobrando, nosotros, por ahora, estamos cobrando a las grandes empresas e instituciones. En nuestros planes no está cobrar a los clientes minoristas por el momento, pero en adelante monitorizaremos las dinámicas de los tipos de interés y de la competencia para tener en cuenta nuestra posición». La respuesta, aunque no fue tajante, deja la puerta abierta a cualquier decisión.
Genç también abordó otros temas como el impacto del «caso Villarejo», el supuesto espionaje a empresarios y político encargado al excomisario que investiga la Audiencia Nacional. Afirmó que a día de hoy no ha tenido impacto directo ni en el negocio, ni en la cotización de la entidad en bolsa, y ni siquiera en su reputación.
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«La reputación es algo difícil de medir, es un activo intangible», ha dicho el «número dos» de BBVA, aunque ha precisado que según la metodología «RepTrak», que es la que utilizan todos los bancos, «no se ve impacto». «La reputación está estable», ha sentenciado.
La afirmación contrasta con la que hizo el propio Genç a finales de julio, cuando admitió que las noticias que se publicaban sobre este escándalo afectaban negativamente a la reputación y la imagen del banco. Incluso, BBVA ha incluido en sus últimos folletos de emisión de valores de renta fija los riesgos derivados de la investigación por el «caso Villarejo», que podría suponer para la entidad «multas y daños o perjuicios» a su reputación, según reconocía.
El número dos del BBVA también abordó el tema de las posibles fusiones. Comentó que el foco de la entidad «está en el crecimiento orgánico y en mejorar el servicio gracias a los avances de la tecnología y la digitalización. Tenemos un 14% de cuota en España y esperamos seguir creciendo con créditos al consumo, pymes y empresas».
Sin embargo, en su reunión con analistas, Genç fue más allá, según Europa Press. «Solo haremos una operación cuando creamos que tiene sentido estratégico y financiero. Solo cuando creamos que pueda generar valor para nuestros accionistas, analizaremos las oportunidades», dijo.
Aseguró que no preparan ningún ERE ni cierres de oficinas más allá de los habituales de cada ejercicio, pese a que admitió que los clientes cada vez utilizan menos las sucursales porque operan por medios digitales. Genç comentó que el 58.9% de las ventas de productos se hacen por medios digitales y que el 55,7% de los clientes se pueden considerar digitales y el 49,7% operan por móvil.
Respecto a los resultados, destacó la eficiencia y la rentabilidad, así como los indicadores de riesgo en los principales países. Todos los márgenes de la cuenta de resultados presentan incrementos, mientras los gastos suben un 1,1% y las provisiones se elevan un 12,7% por el deterioro de los activos de la filial de Estados Unidos, según la entidad. Las operaciones financieras se mantienen estables respecto a 2018 gracias a la venta del negocio de tarjetas en Argentina.
En cuanto al resultado por diferentes países, destaca el incremento del resultado en México, donde el BBVA gana 1.965 millones, un 6,9% más, y consolida a este país como el motor del grupo ya que casi dobla al siguiente en relevancia, que es España, donde logra 1.064 millones, con una caída del 2,5%; en América del Sur obtiene 569 millones, un 24,5% más; en Estados Unidos consigue 478 millones, una caída del 11,8%, lo mismo que sucede en Turquía, país en el que logra 380 millones, un 21,8% menos.
Con estos datos, México aporta el 43% del resultado, España el 23,4%, América del Sur el 12,5%, Estados Unidos el 10,5%, Turquía el 8,3% y lo demás son participaciones en Asia.
Caída del 2% del crédito en España
En cuanto a España. el BBVA dice que sus resultados han caído por la menor actividad del tercer trimestre, debido al verano y los impactos de la nueva regulación. Los depósitos de la clientela han disminuido un 1,5% y los préstamos un 2,1%, mientras la morosidad ha mejorado desde el 5,1% al 4,6%. Las comisiones netas subieron un 1,3% y las operaciones financieras disminuyeron un 62%.
México sigue dando alegrías al grupo, con un incremento del 11% en los créditos, mientras la morosidad se mantiene en un 2,4%, frente al 2,1% de hace un año, pero el coste de riesgo (los fallidos medios que se perciben al prestar) cae del 3,07% al 2,98%. Los depósitos se incrementan un 5,3% los depósitos y la eficiencia se sitúa en el 33%.
La clave de México es que el margen que obtiene el banco sobre sus activos totales es del 5,5% en México frente al 0,98% de España, es decir, tiene cinco veces más rentabilidad. En América del Sur todavía es mayor, 6,21%, en Estados Unidos este ratio es del 2,47% y del 3,9% en Turquía.
Turquía es una filial en la que el grupo ha puesto grandes esperanzas, pero la compleja situación política y económica no permiten recuperar las cifras de años anteriores. El beneficio cae en septiembre tras una contracción de la concesión de los créditos, un 12,4% de descenso en tasa interanual, mientras la morosidad ha subido desde el 6,3% al 7,2% «debido al deterioro de algunos clientes mayoristas», según el banco.
En el grupo consolidado, se elevan los depósitos (+3,7%) y los créditos (+2,1%) y la morosidad se sitúa en el 3,9%, ligeramente por debajo a la que tenía hace un año.
En cuanto al capital y la rentabilidad, temas de máxima relevancia para el sector, el BBVA tiene un ratio de CET 1, el capital de máxima calidad, del 11,6% en septiembre pasado frente al 11,3% de hace un año. Los analistas y los supervisores apuntan al 12% como objetivo de este ratio. La rentabilidad sobre recursos propios (ROE), ha caído hasta el 10,1% desde el 12,1% de hace un año. El objetivo de las entidades es no estar por debajo del 10% que se considera el coste del capital y permite ofrecer la rentabilidad por dividendos que demandas los inversores. El BBVA ha establecido el reparto de dos dividendos anuales, uno lo distribuyó el 15 de octubre pasado, de 0,10 euros brutos, y otro lo entregará en abril de 2020. Tiene previsto pagar en dividendo entre el 35% y el 40% del beneficio del ejercicio.
En un hecho remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), el BBVA destacado que los resultados se han obtenido gracias a un crecimiento generalizado de los ingresos de carácter más recurrente.En una nota, el consejero delegado de BBVA, Onur Genc, apunta que «a pesar del complejo entorno macroeconómico», el modelo de negocio diversificado, permite mantener al banco «unos buenos indicadores de riesgo y una sólida posición de capital».
ampliar foto El BBVA ganó 3.667 millones, el 15,2 % menos, por falta de extraordinarios Fachada de la sede corporativa del BBVA, en Madrid. EFE/MARISCAL EFE Fuente: El País