Sacudida en el mercado británico de las telecos. El gigante estadounidense Comcast venció en la batalla con Fox y Walt Disney por hacerse con Sky con una oferta final de 30.600 millones de libras (unos 34.129 millones de euros). De esta forma, ha pasado a controlar un gigante de la televisión de pago en Europa con 23 millones de clientes, pero también el segundo operador de banda ancha de Reino Unido, con una cuota de mercado del 24% (solo por detrás de BT), y más de medio millón de clientes móviles.

Así, Comcast entra en un país en el también opera Telefónica. Y con doble vertiente. Serán competidores, pero también socios. Sky actúa como operador móvil virtual (OMV) en Reino Unido a través de la red de O2, la filial local de Telefónica.

En cualquier caso, el movimiento tiene una gran implicación para el conjunto del mercado. En un informe publicado este lunes, RBC Capital cree que la compra de Sky por Comcast es negativa para el resto de los operadores británicos frente a la alternativa de Disney. ”Comcast tiene una escala considerable y mayor experiencia como operador de televisión por cable y telecomunicaciones. Podría usar esa posición para invertir de forma agresiva tanto en el negocio de banda ancha fija como en la telefonía móvil, incrementando la presión competitiva sobre los operadores actuales”, dicen estos analistas.

De todas formas, RBC advierte de que Comcast todavía tiene que decidir si se mantiene en el sector de las telecos o si, por el contrario, opta por salir. El banco de inversión cree que Comcast permanecerá en Reino Unido pero descarta su expansión en el segmento de telecos en Alemania e Italia, donde Sky tiene presencia en el ámbito de la televisión.

Telefonía móvil

“Sky es actualmente un OMV, pero podría buscar la compra de espectro para el negocio móvil, especialmente si O2 y Hutchison Three intentan su fusión de nuevo. De esta forma, pasaría a ser un operador móvil de red”, señalan estos analistas. Y añaden que Sky ha demostrado su poder en el campo minorista, que le ha llevado a estar en uno de cada tres hogares británicos, y pasar de no tener presencia a alcanzar el 24% del mercado de banda ancha en 13 años.

Con respecto a la opción de vender los activos de telecos de Sky, valorados en 4.500 millones de libras (unos 5.016 millones de euros), RBC cree que la única operación racional de grupos británicos sería una oferta bien de Telefónica O2, bien de Hutchison Three. En su opinión, es muy improbable una integración con otro grupo de banda ancha como BT, Virgin Media o Talk Talk desde el punto de vista de la competencia.

“La lógica para O2 y Three es la misma, ambos son operadores móviles sin negocio fijo. Combinando ambos, ofrecerían tarifas convergentes con la posibilidad de hacer ofertas cruzadas de servicios con amplias sinergias”, señala la entidad. Ahora bien, afirman que Telefónica no es un comprador probable del negocio de banda ancha fija de Sky debito a su apalancamiento, que ha buscado reducir. Además, recuerda que el grupo español vendió su negocio fijo hace años, precisamente a Sky.

Llegada al mercado español

La compra de Sky también abre la puerta del mercado español a Comcast. Y es que Sky lanzó su oferta de televisión de pago en España en 2017 bajo la fórmula de OTT. En su avance, Sky destacó su acuerdo de distribución establecido con MásMóvil (Yoigo) para la comercialización de los contenidos.

Las acciones de Sky subieron ayer un 8,6% hasta 17,21 libras, ligeramente por debajo de las 17,28 libras que ofrece Comcast. La cifra, en cualquier caso, es más del doble de la oferta inicial de Fox, de 7,65 libras por acción.

Fuente: Cinco Días