La ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, comparece hoy en el Congreso de los Diputados a petición propia y previo acuerdo con la Diputación Permanente, que la van a interrogar sobre la subida de los precios eléctricos y el bono social de la tarifa de la luz.

 Según ha venido informando el propio ministerio, Ribera va a aprovechar dicha su comparecencia en la Comisión de Transición Ecológica del Congreso, para concretar algunas de las medidas que ha prometido desde su llegada al Gobierno: una nueva regulación del autoconsumo eléctrico, con la desaparición del llamado impuesto al sol; la ampliación del número de beneficiarios del bono social de la luz y la creación de otro bono para el gas natural, amén de medidas para frenar los precios eléctricos.

Es en este último punto en el que Teresa Ribera parece haber encontrado los mayores problemas: las reticencias del Ministerio de Hacienda a eliminar alguno de los impuestos medioambientales que gravan la producción eléctrica, especialmente el del 7% y a aumentar los fondos que ahora se destinan a sufragar los peajes de la luz procedentes de las subastas de derechos de emisión de CO2, que pasarán de los 500 millones anuales recaudados hasta ahora, a unos 1.400 millones de euros que se estiman para este año.

El precio de estos derechos se han triplicado en lo que va de año (de 6-7 euros por tonelada a más de 20 euros) provocando una subida de los precios y el citado incremento de ingresos por parte de Hacienda.

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Aunque el ministerio ha mantenido bien guardadas las medidas a anunciar, se ha generalizado la idea de que Ribera no tendrá margen para adoptar medidas fiscales y tampoco la reforma de mercado que tantos ansían. Sin embargo, estos temas han estado encima de la mesa: además de la eliminación del 7%, que se compensaría con la mayor recaudación por las subastas de CO2, el ministerio ha debatido sobre la posibilidad de imponer a las tecnologías inframarginales (como la hidráulica) una compensación, ya que estas son las mayores beneficiadas de los precios altos y no pagan derechos de emisión.

Otra de las iniciativas a debate y descartada es ha sido la de imponer un precio fijo al agua y la nuclear, que se saldaría al final de un periodo concreto, como el año o el trimestre.

Finalmente, al Ministerio de Transición Ecológica se centrará en el bono social de la luz (y crear otro para el gas), que financian las eléctricas, para ampliar el número de beneficiarios. O, al menos, mantener, los del antiguo bono, que aún no ha desaparicido. Según datos de la CNMC, solo 650.000 usuarios se han acogido hasta ahora al nuevo mecanismo, con lo que quedan 1,8 millones del antiguo, que, si el Gobierno no lo remedia, se quedarán fuera a partir del próximo 8 de octubre.

Nuevo récord

El precio mayorista de la electricidad registra este miércoles un nuevo máximo anual, con una media para el día de 75,93 euros MWh, según datos del operador del mercado, OMIE.

Este nuevo repunte supera el máximo de 75,39 eurosMWh que se alcanzó el pasado día 12. La baja aportación en estos últimos días de las energías renovables, especialmente de la eólica, unido al encarecimiento de los derechos de emisión de CO2 y del gas, alimentan la subida.

El precio del pool se aplica aproximadamente a la mitad de la factura de los domésticos acogidos al PVPC. La otra mitad son los peajes, que se mantienen invariables desde hace varios años.

Fuente: Cinco Días