La firma de moda infantil gallega Pili Carrera ha presentado este viernes en el Juzgado de lo Mercantil de Pontevedra concurso de acreedores ante la imposibilidad de «hacer frente a las obligaciones contraídas con sus acreedores en los plazos acordados» en un «entorno complejo y competitivo», según ha informado la agencia de noticias Europa Press. Estos últimos años, la marca se había convertido en una de las favoritas de varias casas reales europeas: los príncipes de Suecia, los de Dinamarca y los reyes de España han sido varios de sus clientes más fieles.

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La firma ha enviado este viernes un comunicado en el que explica que ha tomado la decisión por «responsabilidad» después de haber intentado en los últimos meses «hacer frente a la totalidad de los compromisos de pago por diversas vías, sin que ninguna haya obtenido el resultado esperado». Aunque Pili Carrera estaba presente en al menos 14 países y puntos de venta tan prestigiosos como los almacenes neoyorquinos Neiman Marcus, el proyecto continuaba gestándose desde Pontevedra, donde Pilar Carrera fundó la marca hace medio siglo. Su hija Salomé Carrera era la actual directora de la compañía.

En el comunicado, la firma dice que la situación que se plantea a corto plazo es acordar un plan de viabilidad y un plan de pagos con los acreedores; un acuerdo que confía en que «sea la solución para la continuidad de la compañía y de los puestos de trabajo». Pili Carrera también expresa en el texto su compromiso con sus clientes, red de tiendas propias, socios franquiciados y establecimientos detallistas tanto en España como en el extranjero: «Este compromiso pasa por continuar apostando como hasta ahora por un modelo de fabricación realizado en su centro de Mos [Pontevedra]».

Pili Carrera (izquierda) y su hija Salomé, en agosto del año pasado en Madrid.ampliar foto Pili Carrera (izquierda) y su hija Salomé, en agosto del año pasado en Madrid.

La ceremonia de entronización de los reyes de Holanda el 30 de abril de 2013 se interpretó como un punto de inflexión en la historia de la firma, ya que la reina Máxima eligió varios diseños de la compañía gallega y llamó a la firma para encargarlos. Pili Carrera se los proporcionó sin saber que serían expuestos a una audiencia mundial. Los vestidos de la compañía rondan los 80 euros, aunque hay modelos, como los que llevaron las princesa holandesas en la entronización, que superan los 170.

La firma tiene unos 800 puntos de venta a través de superficies multimarca y más de 50 tiendas (propias y franquicias) repartidas entre Kuwait, Perú, Rusia, Estados Unidos y otros 10 países más. Todos sus productos se fabrican en la sede que la compañía tienen en Mos, donde trabajan alrededor de 100 personas. Allí también se centralizan las tareas de diseño, desempeñadas por un equipo de varios creativos

Fuente: El País