Telefónica señaló en su informe anual de 2018 que las modificaciones introducidas por la NIIF 16 tendrán un impacto significativo en sus estados financieros por sus numerosos contratos de arrendamiento de torres, circuitos, inmuebles para oficinas y tiendas y terrenos donde se ubican torres propias.
La teleco estima que el balance de apertura de la fecha de transición reflejará un incremento en la cifra de activos y pasivos por un importe entre 7.400 y 8.100 millones de euros, en relación con los derechos de uso y obligaciones de pago derivados de la mayor parte de los contratos que bajo la normativa vigente se clasifican como arrendamientos operativos.
En este sentido, en su informe de resultados, la compañía estima un incremento del ratio de endeudamiento como consecuencia de los cambios mencionados de aproximadamente 0,2 veces. Como referencia, la venta de las filiales centroamericanas, cerrada en las primeras semanas del año ha tenido un impacto positivo en la reducción del ratio de apalancamiento de Telefónica de 0,04 veces.
En cualquier caso, el mercado no ha castigado a la compañía por este motivo, al considerar que este cambio solo tiene un impacto contable. La directora financiera de Telefónica, Laura Abasolo, dijo ayer que el impacto en el apalancamiento será muy marginal.
Fuente: Cinco Días