Jeff Bezos va a cerrar su empresa en el sector de la comida a domicilio, Amazon Restaurants, al no hacer mucho negocio. Eso deja a Grubhub, Uber o DoorDash tratando de dominar un mercado estadounidense hambriento de capital con márgenes cada vez menores. Plantarlas en la mesa parece inteligente.

Bezos habló de la virtud de los experimentos fallidos en su carta de 2018 a los accionistas, diciendo que a medida que las empresas crecen, el tamaño de sus fracasos también debería hacerlo; si no, es que no invierten lo suficiente. Amazon ha tenido muchos: reservas de hotel, ofertas rápidas y teléfonos móviles, por ejemplo.

Para una empresa en expansión, saber cuándo dejarlo es quizá tan importante como correr riesgos. Amazon es famosa por invertir durante años en negocios que pierden dinero. Pero una mirada a la comida a domicilio sugiere que mantener viva Amazon Restaurants habría sido un claro error.

Grubhub, de 6.000 millones de dólares, DoorDash, de 12.600 millones, y Uber, de 71.000 millones, tienen más del 80% del mercado; Amazon Restaurants está muy abajo, según Second Measure. Aunque la entrega de comida a domicilio está creciendo, las empresas luchan por ampliar su cuota y eliminar rivales, y la guerra de precios está hundiendo los márgenes. La tasa de ganancias de Uber Eats –sus ingresos respecto a lo que cobra el restaurante o conductor– cayó por debajo del 10% en el primer trimestre.

La presión no cederá pronto. Uber y Grubhub quieren mostrar crecimiento, mientras que DoorDash y Postmates están valorando salir a Bolsa. Y todo el mundo persigue el sueño de eliminar a sus rivales y obtener beneficios de clientes enganchados y de la menor competencia.

La salida de Amazon no lo aliviará. Para las empresas que no pueden o no quieren renunciar, la fusión con sus rivales podría salvar los muebles. Uber se retiró de China, Rusia y otros mercados de VTC a cambio de participaciones en empresas locales por valor de casi 12.000 millones de dólares a finales de 2018. Y DoorDash y Postmates consideraron una fusión el año pasado.

Los autores son columnistas de Reuters Breakingviews. Las opiniones son suyas. La traducción, de Carlos Gómez Abajo, es responsabilidad de CincoDías

Fuente: Cinco Días