La semana, que arrancó con el temor de que la guerra comercial entre Estados Unidos y China derivase en un conflicto cambiario tras la depreciación del yuan el lunes se cerrará con la atención de los inversores dirigida hacia la inestabilidad política en Italia.

Alentado por su ventaja en los sondeos, Matteo Salvini, ministro italiano de Interior y líder de la Liga, ha decidido dar por terminada su coalición con el Movimiento Cinco Estrellas y acabar con el gobierno que encabeza Giuseppe Conte, al reclamar la convocatoria de elecciones anticipadas lo antes posible, con el argumento de que ya no existe una mayoría parlamentaria capaz de sustentar al Ejecutivo. El partido ultraderechista ha anunciado hoy una moción de censura contra el primer ministro italiano, Giuseppe Conte, al que hasta ahora habían apoyado en coalición junto a los antisistema del Movimiento Cinco Estrellas (M5S).

«Demasiados noes hacen daño a Italia que, por contra, necesita volver a crecer y volver a votar rápidamente. Quien pierde el tiempo perjudica al país y solo piensa en la poltrona», se lee en una nota del partido, tras la presentación de la moción en el Senado.

Desde primera hora del viernes, la deuda italiana está sufriendo. La ruptura del precario acuerdo de Gobierno italiano está pasando una severa factura sobre la deuda del país. El tipo de interés de los bonos italianos a 10 años se dispara 23 puntos básicos hasta el 1,77%, según datos de Bloomberg. Por su parte, el rendimiento del bono español se sitúa en el 0,22% mientras que el del alemán se sitúa en el -0,58%, con nuevos mínimos.

Principales cotizaciones

Los expertos de Bankinter explican que «a pesar de este movimiento en la deuda italiana, hay que tener en cuenta que desde finales de mayo tras la decisión de la Comisión Europea de no abrir Procedimiento por Déficit Excesivo, el diferencial de Italia ha corregido 73,6 puntos básicos (hasta 209,4 actual).

En renta variable, el Ibex 35 cede un 1% arrastrado por el mal comportamiento del sector bancario.  Los más castigados del sector son Bankia y CaixaBank que caen más del 2%. El sectorial bancario de Europa cae un 1,4% y es uno de los peores de Europa. La banca italiana está sufriendo las consecuencias de las novedades políticas en el país. Banco BPM encaja un recorte del 8%. Ubi Banca, un 5,9%; Unicredit, un 5,5% e Intesa San Paolo, más del 4,5%. El índice Ftse MIb de Milán cae más del 2% y es el peor índice europeo. 

En el Ibex, además de los bancos hay otros valores que hoy están encajando fuertes pérdidas. MásMóvil cae un 6% y ya registra caídas en lo que va de año mientras que ArcelorMittal también cae con fuerza. Concretamente, sus títulos pierden un 4,7%. Telefónica también recorta más del 2,5%. Hoy, el banco de inversión suizo UBS ha revisado a la baja su recomendación desde comprar a neutral.

Guerra comercial

La recuperación de Wall Street en la sesión de ayer, un 1,86% subió el S&P 500 en su mejor sesión en dos meses, parecía anoche abrir la puerta a más subidas, pero el inversor, ya escaldado de sorpresas, se refugia ante cualquier indicio de agravamiento del conflicto chino estadounidense a lo que, además, se une hoy la incertidumbre política en Italia.

Hoy Bloomberg publica que Washington está retrasando la concesión de licencias para trabajar con Huawei a empresas estadounidenses, en represalia por el freno en las importaciones agrícolas por parte de China.

La noticia enfrió rápidamente las subidas iniciales de los índices, vinculadas a la mayor calma en el mercado de divisas. Los índices de China ceden en torno al 0,5%, si bien el Nikkei ha conseguido mantener las ganancias. Los futuros europeos y los estadounidenses giraron también a la baja.

La semana, en todo caso, ha estado marcada por la evolución de la deuda pública, reflejo del temor a una recesión desatada, precisamente, por la guerra comercial y reflejo, también, de la huida del dinero de los activos de riesgo. La deuda española ha marcado estos días el 0,22%, 10 puntos por encima del mínimo de esta semana pero un nivel histórico, mientras la alemana está instalada cómodamente por debajo del 0,5%. La deuda  estadounidense a 30 año ha marcado niveles récord, y la de 10 años, que hace no mucho estaba por encima del 3%, está en el 1,7%.

En el mercado de divisas, el yuan cotiza estable, con un descenso de menos del 0,1% en el tipo de cambio variable. Éste ha bajado un 1,6% en la semana, la mayor caída del año, pero la relativa estabilidad de las últimas sesiones, propiciada por la prudencia del Banco Central a la hora de fijar el tipo de cambio de referencia, ha contenido la sangría en las Bolsas. Con todo, otras divisas se están viendo muy condicionadas, como el yen, beneficiado por la repatriación de fondos del área asiática hacia Tokio. Ha subido un 5% esta semana hasta los 105,9 yenes por dólar.

El euro cotiza, por su parte, en 1,12 dólares, sin muchos cambios en la sesión pero acumulando un descenso de más del 2,5% en la semana. Los malos datos económicos, las rentabilidades negativas en la deuda y la perspectiva de recortes de tipos han agudizado la condición del dólar de refugio en tiempos de turbulencia.

Fuente: El País