La guerra por el control de Dia se acelera. La cúpula de la compañía, liderada por su consejero delegado, Borja de la Cierva, y su director financiero, Enrique Weickert, arrancaron ayer una ronda de presentaciones (road shows) para vender la ampliación de capital de 600 millones de euros. Goldman Sachs y el director de L1 Retail, Stephan DuCharme, la división dedicada a los supermercados de Letterone, se reunieron ayer con analistas en Londres y convocarán a los inversores de Dia para convencerlos de las bondades de su opa a 0,67 euros por acción y de sus posteriores planes estratégicos.

Dos de los grandes bancos de inversión estadounidenses luchan por el favor de los inversores de Dia. Ayer en la sede de Morgan Stanley en Madrid, en Serrano 55, los directivos de Dia respondieron a las preguntas de un grupo de inversores en las acciones del grupo. Fueron encuentros cara a cara en los que se explicaron los planes de la compañía. La hoja de ruta sigue siendo aprobar la ampliación de capital de 600 millones para restablecer los fondos propios negativos, por 166,1 millones en el grupo consolidado. No arrojaron, sin embargo, una horquilla del precio al que se ejecutará la ampliación, si bien fuentes financieras señalan que se baraja un precio entre los 0,01 y los 0,1 euros por título, como publicó CincoDías el pasado 15 de febrero.

Para un precio de emisión de 0,099 euros, tendrían que colocarse más de 6.000 millones de acciones nuevas, lo que supondría una dilución del 90% para los actuales inversores que no acudan a la operación. Si estos no quieren perder peso en el capital, han de inyectar cerca de un euro por cada título de Dia que tengan actualmente en cartera.

La cúpula reconoció que no descarta ningún tipo de solución, incluida la de un acuerdo con Letterone, que controla el 29% del capital, siempre que se busque una fórmula para evitar el concurso de acreedores. Es una negociación a 14 bandas, pues se suman los 12 bancos que forman parte del sindicato de prestamistas del grupo de supermercados. Santander y BBVA son los mayores acreedores. Se baraja un crédito participativo o alguna otra forma de préstamo convertible en capital que inyecte Fridman y aplazar la ampliación de capital a que se liquide la opa del inversor ruso, como publicó ayer este periódico.

Pasado mañana, Letterone presentará la solicitud de autorización de su oferta, según fuentes conocedoras de la operación, y se espera que la CNMV le dé luz verde a partir de marzo. Los road shows capitaneados por Morgan Stanley serán contraprogramados por Goldman Sachs y DuCharme. Tienen que convencer, al menos, a dueños del 35,5% del capital para que la opa sea efectiva a 0,67 euros por acción. Si no logran ese porcentaje, la propuesta decaería instantáneamente. Goldman Sachs intensificará los encuentros hasta que se celebre la junta de accionistas, previsiblemente en segunda convocatoria, el próximo 20 de marzo.

Los accionistas podrán añadir propuestas a la junta hasta el viernes

Los accionistas de Dia aún pueden intentar marcar su propio ritmo a la próxima junta de accionistas de la compañía, que se celebrará el próximo 19 o 20 de marzo. El viernes expira el plazo para incorporar puntos adicionales al orden del día.

La ley de Sociedades de Capital establece que los titulares de acciones de una empresa pueden añadir adendas adicionales hasta cinco días después de publicarse el orden del día de la cumbre. Eso sí, siempre que estos accionistas tengan al menos el 3% del capital social de la compañía y razonen los cambios propuestos.

Actualmente, solo tres accionistas de Dia tienen el peso suficiente para modficar el orden del día de la junta. Se trata, por un lado, de Letterone, el fondo luxemburgués controlado por el magnate ruso Mijail Fridman. Es el primer accionista con el 29%. También podrá hacerlo Goldman Sachs, el banco de referencia de Letterone para el asalto a Dia, que tiene un 5,69%. Y la sindicatura liderada por el empresario canario Pedro Gómez-Pablos y una rama de la familia Halley, exdirectivos y accionistas de referencia de Carrefour. Ni Letterone ni la sindicatura han aclarado ante preguntas de este periódico si harán uso de este derecho.

Letterone, por un lado, ya ha rechazado la ampliación de capital que el consejo lleva a la junta de accionistas por 600 millones y preasegurada por Morgan Stanley. En su lugar, ha anunciado primero una opa a 0,67 euros por acción, siempre que no se lleve a cabo esta ampliación. Propone impulsar su propia ampliación por 500 millones, una vez culmine la opa y renegocie la deuda bancaria.

La sindicatura, por su parte, puso el domingo encima de la mesa ejecutar una ampliación de capital acelerada por hasta 100 millones, sin derechos, y que sería suscrita por estos accionistas sin el apoyo de ningún banco. La junta de 2016 autorizó al consejo a realizar una operación de este tipo antes de 2021.

Los títulares de menos del 3% podrán presentar sus propias propuestas sobre puntos ya incluidos en la convocatoria de la junta. Uno de estos accionistas es Credit Suisse, que ayer elevó su participación hasta el 1,16%.

Fuente: El País