Los grandes planes de Xiaomi acaban de ser tenidos en cuenta por el mercado. Una sombría perspectiva para la demanda de teléfonos inteligentes chinos ha golpeado a la empresa de 33.000 millones de dólares del empresario Lei Jun. La liquidación de acciones sugiere que los inversores no están listos para comprar el bombo publicitario de los servicios de internet.

Alrededor de una cuarta parte del valor de mercado de Xiaomi, con sede en Pekín, se ha disipado desde principios de año en medio de un destrozo tecnológico más amplia. El jefe de Apple, Tim Cook, culpó a las débiles ventas en la Gran China (que incluye Taiwán) por su raro recorte en la previsión de ingresos. Samsung Electronics se hizo eco de las malas noticias, advirtiendo esta semana de que las ganancias operativas del cuarto trimestre caerían un 29%.

El enfriamiento de la demanda de la República Popular será aún más doloroso para Xiaomi. A pesar de que Lei promociona su empresa como una “nueva especie” que integra hardware y servicios de internet, son los teléfonos y los aparatos los que representan alrededor del 90% de los ingresos totales. Y a pesar de una prometedora campaña en el extranjero, Xiaomi depende de China para más de la mitad de sus ventas. La competencia de sus compatriotas Huawei, Oppo y Vivo es feroz, y el mercado ya está saturado. Las entregas de teléfonos inteligentes en la República Popular cayeron un 12% el año pasado, y caerán otro 3% en 2019, calcula la firma de análisis de mercado Canalys.

Todo esto lo ha empeorado un excedente de acciones. Un período de bloqueo de seis meses para operar una gran cantidad de acciones (3.000 millones, equivalentes al 19% de las que seguían bloqueadas) tras el debut en el mercado de la compañía el pasado mes de julio expiró esta semana.

El jueves, el precio de las acciones registró un mínimo histórico, en 9,97 dólares honkoneses (una caída de del 23% desde el comienzo del año), aunque el viernes se recuperó hasta los 10,40. La compañía dijo que los accionistas de control, entre ellos Lei Jun, no venderían acciones durante al menos un año.

Con todo, redoblar la apuesta por los teléfonos inteligentes es lo que tiene más sentido para Lei. Xiaomi logró un impresionante aumento del 50% en las ventas del tercer trimestre, impulsado por una prometedora pero temprana ventaja en India. Se espera que el país sea el único mercado importante donde las compras de teléfonos móviles crezcan este año.

Tras la caída del mercado, Xiaomi cotiza a 17 veces el beneficio esperado en los próximos 12 meses, según muestran los datos de Refinitiv. Esta cifra es superior a las 12 veces a las que cotiza Lenovo, pero inferior al múltiplo de 29 veces las ganancias futuras de Tencent. Mantener las ventas internacionales de teléfonos inteligentes hará más por mantener a Xiaomi en ese punto óptimo que promocionar los dispositivos conectados y un nuevo y revolucionario modelo de negocio.

Los autores son columnistas de Reuters Breakingviews. Las opiniones son suyas. La traducción, de Carlos Gómez Abajo, es responsabilidad de CincoDías

Fuente: Cinco Días