Prácticamente resuelta la crisis de poder en el seno de la compañía de grandes almacenes, El Corte Inglés se rearma corporativamente para volver a la pelea por el mercado, del que parecía haber estado en un plano secundario durante varios años. Por vez primera en su historia ha cambiado el calendario de publicación de sus resultados anuales (su año fiscal termina el último día de febrero), y aunque se trata solo de un gesto, lleva explícito un mensaje de que empieza una nueva era, y que se acerca, aunque sea lentamente, a los comportamientos públicos y de rendición de cuentas de sus pares en el negocio. En qué culminará ese ejercicio de giro corporativo lo dirá el tiempo, pero más allá de la opinión que tenga la clientela de su comportamiento, el equipo de gestión busca decididamente también el asentimiento a sus pasos de la comunidad financiera.

La cuenta de resultados de 2017 presentada ayer tiene también un aspecto mucho mejor que el de años anteriores, y puede la compañía considerar que está en el punto de inflexión que buscaba desde que la crisis comenzó a dañar sus números, y que está preparada para despegar y competir en un mercado transformado por la crisis, en el que sus competidores son mucho más fuertes que en épocas pasadas, puesto que en todas las divisiones del negocio en el que siempre fue una referencia El Corte Inglés, hay ahora al menos una firma sólida que le da réplica.

Aun con un crecimiento limitado de las ventas (menos de un 3%), pero con una cuota de su facturación muy aceptable por vía telemática, ha incrementado notablemente su beneficio antes de costes financieros y también en términos netos, en un ejercicio exigente de gestión de los dos consejeros delegados que llevan el negocio en los últimos trimestres. Tienen ahora en sus manos una empresa financieramente más aseada que hace un año, con una imponente y liberada fortaleza inmobiliaria que es una palanca de primer orden para mejorar y despejar su estructura financiera, y con una estructura de costes que ha entrado en una evidente vía de mejora, factores todos ellos válidos para confirmar el despegue de El Corte Inglés en esta nueva etapa.

Fuente: Cinco Días