El Corte Inglés ha cerrado hoy la emisión de 600 millones en bonos corporativos que anunció la semana pasada con el objetivo de reducir deuda. Los bonos, con vencimiento en marzo de 2024, ofrecen a los inversores un cupón anual del 3%, lo que la empresa considera un «éxito». Según la cadena de grandes almacenes, la demanda por estos bonos, que las agencias de calificación situaron el pasado viernes como crossover, un escalón por debajo del grado de inversión, ha duplicado con creces la oferta.

La primera salida al mercado de deuda de El Corte Inglés con rating de agencias se ha cerrado este viernes con órdenes de compra por más de dos veces la oferta. La emisión de bonos, dirigidos a inversores cualificados y que cotizarán en Irlanda, «ha contado con un fuerte apoyo de la comunidad inversora tanto nacional como internacional», asegura la cadena en un comunicado.

Como ya había afirmado El Corte Inglés destinará los ingresos de la emisión a «amortizar deuda», en concreto a hacer frente a los vencimientos de pagarés de empleados cuyo reembolso sea anterior a abril 2019 y cancelar el préstamo-puente firmado en enero de este año y cuyo importe máximo actual es de 765 millones de euros. La empresa está embarcada en un proceso de reducción de deuda mediante venta de activos y desinversiones. Prevé cerrar la venta este año de su filial de informática (Informática El Corte Inglés) a un grupo mexicano y este año ha vendido edificios por 500 millones.

Los bonos, con vencimiento en marzo de 2024 y garantizados por Viajes El Corte Inglés y Supercor, la cadena de supermercados de convenciencia y proximidad de la empresa, obtuvieron la calificación crediticia BB+ de Standard & Poors y de Fitch y Ba1 de Moody’s. En los tres casos se trata de un escalón por debajo del grado de inversión, el primero del grado de inversión especulativa (lo que coloquialmente se conoce como bono basura).

Como colocadores han participado en la operación Bank of America Merrill Lynch, Goldman Sachs International, Santander, Banco de Sabadell, Bankia, BBVA, BNP Paribas, CaixaBank, Credit Suisse, Crédit Agricole CIB, Deutsche Bank, Société Générale y UniCredit Bank.

Fuente: El País