Ni Amazon ni Leroy Merlin ni Bricor ni ninguna otra cadena de macrotiendas ha tambaleado a Comafe. La cooperativa de ferreteros madrileños nació en 1968. Todo comenzó con la inquietud de un pequeño grupo de comerciantes de la capital por conocer el incipiente movimiento cooperativo que estaba tomando cuerpo en la Comunidad Valenciana y en Asturias.

Alberto González, hijo de uno de los socios fundadores, cuenta cómo su padre contactó con el grupo de ferreteros asturianos que habían creado Cofedas y cómo su presidente, “don Arturo”, se comprometió a ayudarles a montar una cooperativa de ferretería en Madrid. Con ese apoyo y la ilusión y empuje de una docena de colegas, se creó Comafe (Cooperativa Madrileña de Ferreteros). “La primera reu­nión se hizo en el salón de mi casa”, recuerda González que, por entonces, era un joven que aprendía el oficio en el negocio familiar.

Su facturación en ocho años casi se ha duplicado hasta los 88 millones

Allí se eligió como primer presidente a Antonio Hernández Lázaro, que era concejal del Ayuntamiento de Villaverde y se movía bien en ambientes oficiales por su filiación falangista. Alberto González padre fue elegido como vicepresidente. En pocas semanas, boca a boca, corre por Madrid la constitución de la cooperativa. Los apellidos De la Peña, Moro, Roncero, Jara, ferreteros de renombre en la capital, sirven como gancho para que otros muchos se sumen a la iniciativa. En un mes eran ya más de 20 y, en pocos meses más, superaban la cifra de 50. Algunos rechazaron unirse al principio y, cuando lo intentaron luego, ya era tarde porque contaban con socios en la misma zona.

La expansión fuera de Madrid comenzó en 2012 con la incorporación de la zona de Levante, que incluye la Comunidad Valenciana y Murcia. Hoy, tras 51 años de existencia, la cooperativa está formada por 161 socios de diferentes puntos geográficos de España. Además de Levante, ferreteros de Andalucía, Cataluña, Extremadura, las dos Castillas, La Rioja y Navarra se han sumando a este proyecto. Todos ellos están agrupados bajo el paraguas de los puntos de venta Ferrokey.

Exteriores de las oficinas de Comafe. Exteriores de las oficinas de Comafe.

A ellos se suman 333 clientes a través de las tiendas Ferrcash y bajo el modelo de cadenas voluntarias, un sistema similar al franquiciado, pero que aporta bastante más libertad a los integrantes. Las tiendas de Ferrcash se ubican en todas las comunidades autónomas, excepto en las islas Canarias. “Nos gustaría poder expandirnos también allí, pero es algo complicado por las condiciones de logística que presenta”, manifiesta el CEO de Comafe, Alfredo Díaz.

Ingresos

Entre socios y clientes facturan más de 88 millones de euros. Una cifra que sorprende si se piensa en los 49,5 millones que ingresaron en 2011, justo en plena recesión económica. “Hemos demostrado que juntos somos más fuertes. Crecer a estos niveles en plena crisis y con la aparición de nuevos competidores solo es posible si se permanece unido y se ponen por delante de todo nuestros valores y principios empresariales”, afirma Díaz. Entre sus valores, según Díaz, destacan su concepto de proximidad y su asesoramiento técnico a nivel de conocimiento de producto, “muy superior al del autoservicio que emplean las macrotiendas”.

Hemos demostrado que juntos somos más fuertes y es posible competir con las macrotiendas

Alfredo díaz, CEO de Comafe

Sus expectativas de futuro es crecer en los próximos años un 5% anual y pretenden conseguirlo apostando por la omnicanalidad y por la incorporación de las últimas tecnologías en sus tiendas, que van desde los 100 m2 cuadrados de superficie de algunos comercios de Madrid central o Ávila a los 3.000 m2 de Ciudad Real. Pero, además, pretenden elevar su número de socios y clientes, segmentar sus superficies para hacerlas más competitivas y aumentar su capacidad de servicio en el territorio nacional a través de una plataforma logística automatizada en Getafe.

Las claves

Almacén. Almacén.

Facturación. En 2018 Ferrokey ingresó 72 millones, un 7% más que en 2017. Por su parte, Ferrcash obtuvo unas ventas de 16,4 millones, un 9,3% más.

Socios. Para ser socio de Comafe hay que aportar un capital de 55.000 euros que se devuelve junto a los beneficios generados al momento de la jubilación. En los últimos ocho años se han incorporado 59 y se han jubilado 28.

Clientes. Para tener una tienda Ferrcash se deben pagar entre 1.000 y 2.000 euros anuales no reembolsables. A cambio se ofrecen ventajosos servicios de compra, informática, publicidad, logística y asesoría financiera.

Productos. Tienen tres marcas propias: Nivel (ferretería), Viva Hogar (menaje y hogar) y Natuur (jardinería). Entre las tres aportan el 10% de sus ventas.

Logística. Comafe confía en la distribución centralizada a través de dos grandes almacenes. El de Madrid cuenta con 35.000 referencias y 20.000 m2, mientras que el de Alicante tiene 20.000 referencias y 10.000 m2.

Ventas. El comercio online, todavía incipiente en la compañía, supone el 5% de sus ventas, aunque su CEO mantiene que es una cifra relativa, ya que muchas ventas de la tienda física se inician en el online.

Segmentación. En el futuro, Comafe apostará por la segmentación de sus tiendas.

Fuente: Cinco Días