La Comisión Europea planea imponer este miércoles una multa de al menos 4.000 millones de euros a Google por presuntas prácticas anticompetitivas en el mercado de sistemas operativos para móviles con Android, según explican a CincoDías fuentes cercanas al caso. De confirmarse la cuantía, que otras fuentes incluso llegan a situar en los 6.000 millones, sería la mayor multa impuesta por Bruselas. Esta sanción por abuso de dominio con Android, que ya ha sido comunicada a las partes, se añadiría a los 2.400 millones de multa que la comisaria de Competencia, Margrethe Vestager, impuso a la multinacional en junio de 2017 por abusar de su dominio en el mercado de búsquedas por internet.

Vestager parece disponer de pruebas suficientes para dictaminar que Google ha abusado de ese dominio del mercado con Android y lo ha aprovechado para imponer condiciones leoninas a los fabricantes de teléfonos y en detrimento de la oferta que llega a los consumidores europeos.

La investigación de la Comisión contra Google se inició en abril de 2015 y un año después se concretó en un pliego de cargos en el que Vestager enumeró sus sospechas. La comisaria acusó a Google de obligar a preinstalar su buscador y su navegador (Chrome) a los fabricantes de móvil que desean usar Android. La firma, según la CE, también exige que los fabricantes se comprometan a no modificar el sistema operativo (que es abierto) si quieren utilizar las aplicaciones creadas por Google. Bruselas, por último, acusa a la firma de conceder incentivos financieros a los fabricantes de teléfonos y de tabletas, así como a los operadores de telefonía, para que se comprometan a utilizar solo sus productos.

Bruselas puede imponer sanciones de hasta el 10% de la facturación anual de una compañía, lo que en el caso de Google podría llevar a una multa de hasta 9.400 millones de euros. Aunque la Comisión Europea nunca ha apurado su margen sancionador (rara vez ha llegado al 3%), esta vez sí podría aproximarse más. Si finalmente, la multa es de 4.000 millones supondría el 4,25% de la facturación de Google de 2017, y si le imponen una de 6.000 millones, el porcentaje sobre ingresos se elevaría hasta el 6,4%.

La industria, en cualquier caso, también estará pendiente este miércoles de conocer si Bruselas impone a Google alguna restricción respecto a sus políticas comerciales con Android, más allá de la multa. Medidas, en definitiva, que pudiera impactar negativamente en su negocio móvil. No hay que olvidar que en múltiples países de la UE, el 90% de los smartphones funcionan con el sistema operativo del gigante de internet. A nivel global, la cuota de mercado de Android es del 85,9% frente al 14% de iOS de Apple.

Además, de los casos de Google Shopping y Android, Bruselas mantiene abierto un tercer expediente contra la multinacional también por abuso de posición dominante, en este caso a través de Adsense, según recuerda EP, al sospechar que la compañía impone restricciones a páginas web terceras a la hora de ceder espacio a anuncios contextualizados de sus competidores.

Fuente: Cinco Días