
Boeing ha relevado a su consejero delegado, Dennis Muilenburg, según ha informado hoy el gigante de la aeronáutica. El primer ejecutivo de la empresa estaba en primera línea de los focos a causa de los catastróficos errores de diseño del Boeing 737 Max que provocaron dos accidentes aéreos, la muerte de 346 personas hace un año y la consiguiente prohibición del vuelo de estos aparatos.
Será relevado a partir del 13 de enero por el presidente, David Calhoun, quien compatibilizará los dos cargos. Mientras tanto, el consejero Lawrence Kellner será presidente no ejecutivo, y el director financiero Greg Smith, CEO.
La dimisión de Muilenburg había sido barajada por los medios en los últimos meses, especialmente desde que la empresa le retiró el cargo de presidente. «El consejo de administración ha decidido que un cambio en el liderazgo es necesario para restaurar la confianza en la compañía mientras trabaja en reparar las relaciones con reguladores, clientes y otras partes vinculadas», indicó Boeing en un comunicado.
El despido del ejecutivo llega mientras la empresa intenta desbloquear las aprobaciones regulatorias para la que era su aeronave estrella. Las acciones han subido tras conocerse la noticia. Boeing ha tenido que parar la producción del 737 Max, dado que no puede entregar los pedidos al carecer de permisos de vuelo y acumula varias decenas de aparatos sin estrenar.
Fuente: Cinco Días