La Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) inició ayer oficialmente el proceso para las elecciones a presidente, que se celebrarán el 21 de noviembre (como adelantó EL PAÍS). Prácticamente al mismo tiempo de que, a propuesta del actual presidente, Juan Rosell, la junta directiva aprobaba la fecha, Antonio Garamendi, presidente de Cepyme y vicepresidnete de CEOE, presnetaba su candidatura.

Una vez que se hizo realidad algo que ya estaba cantado, se sucedieron las intervenciones.  Prácticamente, han pedido la palabra todas las principales patronales, tanto territoriales como sectoriales, que han elogiado a Rosell y manifestado su apoyo a Garamendi.Entre ellas están las que más peso tienen: Madrid, Andalucía, Valencia, Aragón, Metal, País Vasco, Banca, Farmaindustria, Construcción, Químicas, Alimentación…  

También ha intervenido, el dirgente catalán, Joaquim Gay de Montellà, quien ha mantenido la posibilidad de presentarse hasta hace muy pocas fechas cuando constató que no contaba con el respaldo suficiente para optar a la presidencia. El presidente de la patronal catalana Foment felicitó al dirigente vasco, con el que no ha tenido buenas relaciones duarnte estos años.

Otro de los que intervino fue el presidente de la patronal madirleña CEIM , Juan Pablo Lázaro, que envió un comunicado en el que hace público el apoyo de los empresarios madrileños a Garamendi incluso nates de que la CEOE emitiera la nota de presnetación oficial d ela candiatura de Garamendi.

En el entorno de la patronal no se espera que haya ninguna otra candidatura. Incluso alguno de los dirigentes empresariales que han intervenido esta mañana han propuesto que haya un pronunciamiento de unanimidad, algo que no ha prosperado.

El censo electoral asicende a 737 vocales de la Asamblea General que debe constituirse para los comisios. Las organizaciones integrantes tienen hasta 25 días antes de la fecha electoral para dessignar sus representantes. Las candidfaturas se pueden presentar hasta siete días antes, es decir, hasta el 14 de noviembre. Las candidaturas deberán estar avaladas al menos por 20 apoyos de vocales que, a su vez, reoresenten al menos a cuatro organziaciones de pleno derecho. Nadie podrá dar su aval a más de una candidatura.

El votyo es presencial y secreto, sin delegación de voto. Únicamente podrán ser electores los representantes que cumplan con el requisito de pertenecer a la nueva asamblea y siempre que la organización a la que representan esté al corriente del pago de cuotas. En el caso de que no esté, tiene de plazo un mes para su regularización. La mesa electoral se constituirá con tres miembros del comité ejecutivo que no hayan presentado candidaturas. 

Fuente: El País